Bruni en su casa: la ciudad de los dioses

Tan cerca... y tan lejos. Así está Carla Bruni, bajo el mismo techo de estrellas donde duermo. Cerca de mi corazón, de éste cuerpo que es un burdo reflejo de un alma perdida. Lejos... como siempre, reconociendo tus ojos a quien no se sabe que existe.
Con un impresionante cerco de seguridad Calderón y su homólogo de Francia con sus respectivas esposas dieron un paseo por Teotihuacan. Además de despejar el área dos horas antes de la llegada de éstos, la única diosa presente se distinguió como siempre dejando estupefactos a quien la veía. Parecen olvidados los conflictos del INAH, el "resplandor teotihuacano", la llegada del Wall Mart, los conflictos agrarios, entre otros; el arribo de una diosa lo puede todo.
Inaudito no ver a Peña Nieto queriendo ser visto en el mundo.
Calderón vestido seudoinformal mal combinado de tonos azules y pantalón negro, junto a su esposa Margarita con un horrible chal rojo, eran opacados con el impecable estilo de la pareja francesa, Sarkozy de negro con camisa blanca y Bruni de blusa blanca con aire despreocupado, aunque claramente sorprendida.
Todos los diarios de circulación nacional llevan en primera plana diversas fotos de los mandatarios en las pirámides, pasando por alto los super-salarios de los consejeros del IFE, magistrados de la SCJN o el CJF. Olvidamos los ejecutados por el narco, la fallida "guerra", la palabrería electorera y otros sinsabores.
Gracias diosa gala por mitigar nuestras penas y hacer que olvidemos el dolor.Imagen: La Jornada
Una cita en tierra de dioses