lunes, 26 de enero de 2009

Crisis existencial

Juegas con tu voz sin pensar en quien te escucha. Tras el sobrio velo de la noche te escondes, ni una palabra. Quien te escucha soy yo. No estás a mi lado y tu recuerdo me tortura en pensar dónde estás. Adivino tu rostro que debería estar aqui; cada vez que te toco no estás.
¡CALLA! No lo tolero. Eres una criatura que me duele, bebes de mis sueños... sueños. No eres un sueño porque escucho tu voz, dulce, tierna, muriendo entre mis brazos. ¡No sigas cantando! Comparte tu cuerpo en el desierto y aléjate tan pronto me vaya.
Mis párpados me pesan, mis piernas no responden y te encuentro rodeada de espejos. Siempre has estado ahí, atrapada en la cárcel de mi mente asesina. Pero sigues intacta al calor de mi mirada. Te amo, maldita sea. No puedo llegar, me pierdo, olvido. No estás.
Ausente sigues cantando, eres una pieza perdida, una artista lejana a mi que recuerdas a los dioses. Noche abandonado sin ti... abandonado sin ti noche... sin ti noche abandonada... en mi mente mueres asesinada por alguien que se parece a mi.

No hay comentarios: